Propuesta de las incensarias de las iglesias, de humos blancos, de dorados dínteles y crucifijos con cristos sangrantes realistas y con movimiento, exudando el carmesí líquido de sus llagas y laceraciones, encarnación de la buena nueva, de la agua de vida, del bendito aliento del señor, de la anunciación de los ángeles, en Bethehelem naciste rodeado de animales entre pajares, en tú adviento espere y espere, por seguir una estrella en cielo, esa estrella habría de traerte al mundo en un abrir y cerrar de ojos, en una noche como aquella, y los reyes magos Gaspar, Melchor y Baaltazar te reendirían culto, ofrendandote el incienso por ser sagrado hijo de Dios, el Oro por ser rey del mundo y del otro, y la Mirra por que habrías de morir en la cruz por nosotros, que de tú sangre beberían los hombres en la Eucaristía y de tu carne en la ostía sería repartida, así como el sermón de la montaña, tú múltiplicaste los panes y los peces, y repartiste entre las mujeres, los hombres y los niños la abundancia, y que en las bodas de Cannaan brotó el vino en las ánforas para los festejos de la misma, en el templo de Salomón a los fariseos diste lección por conocimiento de sus propias artes, ellos se enfadaron e intentaron darte caza hasta el final, y en una noche de desgracia en el monte de los olivos llevaron arrestado por treinta monedas de oro que cobro Judas Iscariote, después de haber cenado en tú mesa y haber comido de tú pan y haber compartido tú vino, ante los tribunal de los sumos sacerdotes del templo primero te hostigaron, luego ante Poncio Pilatos, y el viendo que no podía dar explicasión a sus pretensiones te envió ante los el rey Nabateo, Hérodes, pero no él grande si no el que le siguió, luego los judíos te enviaron ante Pilatos nuevamente y dijeron a este, ¡¡¡castigadlo!!!, por ser la pascua en esa época a un hombre debían libertar y trajeron a un asesino y ladrón, elijan vosotros a quien libertar Judíos, a Barrabas o a Jesús de Nazareth, los judíos prefirieron libertar a Barrabas, por el camino del vía crucis pasaste los martirios, y finalmente en la cruz con dos hombres a tu lado fuiste finalmente sacrificado, por que tu eras el cordero que quitaba el pecado del mundo, y tú sangre debía ser derramada para perdonar a todos, y en el costado finalmente una lanza te dío la paz de la muerte, bajaste a los infiernos y ascendiste a los cielos, volviste después de tres días en resurección, los ángeles les dieron el mensaje a las Marías que nunca habías muerto, y que andabas entre los vivos, y el apóstol Tomás dijo a los demás ver para creer, entre ellos te apareciste y les disjiste que tocarán tus llagas, y finalmente se dieran cuenta que eras tú el que habías vuelto entre los muertos.
Era ello pues que de la reminicencia de tales historias del nuevo testamento los sacerdotes dieron paso a la comulgación, y entre los fieles hubo silencio y la paz gobernó, el mundo y los cielos por un instante...
Marcos Andrés Barros Ketterer (Marcvs Ivlivs Nerva A. I).
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